El domingo 7 de mayo Juanlu, Cristina y un servidor nos dispusimos a realizar una ascensión inédita y poco frecuente, la subida a la Sª de los Pinos de 1.396 m. en las estribaciones de Cortes de la Fra. El día estaba estupendo, claro y con una brisa fresca que ayudaba en la ascensión.
Partimos de Cortes por la pista que sube desde el Instituto hacia la bifurcación de Libar y la Sª de los Pinos. En este primer tramo se pasaba de los 650 m. de Cortes a los 1.000 m. del puerto.
La ascensión la realizamos siguiendo un cruce a la derecha que claramente enfila la cima y al poco en un llanito una vereda parte hacia la derecha que va hacia el norte ha un collado claramente dominado por vegetación. Aquí las encinas, el musgo, Peonías, alguna orquídea y pinsapos de pequeño porte crean un ambiente sorprendente a estas alturas.
Partimos de Cortes por la pista que sube desde el Instituto hacia la bifurcación de Libar y la Sª de los Pinos. En este primer tramo se pasaba de los 650 m. de Cortes a los 1.000 m. del puerto.
Hacia la izqda. la pista continuaba ascendiendo por otro collado hasta los 1.250 m., altura máx. antes de comenzar a descender de nuevo hasta la base de Los Pinos.
Las Peonías abiertas adornaban estos verdes parajes.Llegamos a un pequeño valle muy verde con una casa semiderruida donde comimos algo antes de acometer la definitiva subida. Se apreciaba desde aquí el hito de la cima y el Cedro solitario que habita en esas altitudes.
La ascensión la realizamos siguiendo un cruce a la derecha que claramente enfila la cima y al poco en un llanito una vereda parte hacia la derecha que va hacia el norte ha un collado claramente dominado por vegetación. Aquí las encinas, el musgo, Peonías, alguna orquídea y pinsapos de pequeño porte crean un ambiente sorprendente a estas alturas.
La vegetación va cambiando drásticamente desapareciendo la arboleda por el matorral típico de altura.
Pasamos junto al Cedro que tiene una malla de protección para que las cabras montesas no lo degraden y al poco se divisa la arista. Al pie del hito una placa da testimonio del lugar en el que estamos. Aquí el aire es bastante fresco, la vista nos permite divisar Marruecos, la Sª de Grazalema, Sª Bermeja...
El descenso lo realizamos igualmente hasta la casa en ruinas de la base y allí tomamos un sendero en dirección NE hacía Cortes. Baja al principio suavemente entre pequeños torcales donde algunas cabras montesas nos salen al paso. Estos lugares son bastante verdes y poseen una vegetación que nos sorprende. Seguimos descendiendo a través de una bajada enérgica que busca Cortes rápidamente. El descenso nos machaca las piernas pues bajamos desde los 1.396 m. casi sin descanso. Poco a poco va apareciendo Cortes y la senda va confluyendo hacia la pista original desde la que partimos. Finalmente la alcanza y nos deja de nuevo en el punto de partida. 16 kms. en total con un desnivel de unos 700m.